Royal Family

"Me cago en la República!, estos cabrones me dan más guerra que Tejero, Peñafiel y Urdangarín juntos!" (King Juan Carlos de Borbón)

"A papá ya no hay quien lo cambie a su edad. Estos días estamos intentando quitarle otra locura de la cabeza: Se ha empeñado en que le presten un submarino de la base naval de Cartagena para irse a cazar ballenas" (Sucesor Felipe de Borbón)

"A mi me regalaron mi primera escopeta cuando aprendí a escribir mi nombre completo" (Felipe Juan Froilán de Todos los Santos Marichalar Borbón)

"Mi papá es tan excéntrico que a veces me pregunto si es un Marichalar y no un Borbón" (Infanta taurina Doña Elena de Borbón)

"A mi me cae muy bien Obama porque cazó a Bin Laden. Lo pillan?, ji, ji, ji!" (King Juan Carlos de Borbón)

"Me da escalofríos pensar que mi marido pueda ser de mayor como su padre" (Doña Princesa Letizia)

"Yo no quiero ningún trato con mi suegro porque su conducta no es ejemplar" (Duque imputado Urdangarín)

"Cualquier día le denuncio a mi marido por maltrato sicológico. Esto es un sinvivir!" (Queen Sofía de Grecia)

"Anticazadores?..., antitaurinos?..., antomonárquicos?... Menuda pandilla de maricones, ji, ji, ji!" (King Juan Carlos de Borbón)


Un asesino como los demás (8)

Doña Purita se deshizo en alabanzas y zalamerías hacia el caballero recto y cabal, cortés y servicial que se había prestado a subirla el carrito de la compra hasta su vivienda el cuarto piso de aquel edificio antañón.
- Y ahora no me rechazará un chocolatito con pastas, que bien que se lo ha ganado usted, buen hombre!... Ay, si todos fuesen tan caballerosos como usted!...
Don Angel Luis aprovechó para ponerse los guantes antes de entrar en acción, limpiando previamente las huellas que había dejado en el carrito de la compra, mientras Doña Purita trajinaba en la cocina con las tazas y cucharillas y calentaba el chocolate.
Cuando la anciana regresó con las humeantes tazas de chocolate, el asesino observó algo que le llamó mucho la atención.
- Qué pulserita más rara, no?
- Ah, esto?, nada, una pulserita que nos ha puesto el ayuntamiento a todas las abuelas para que nos proteja de ese monstruo que anda suelto. No se ha enterado usted, no ve la tele?...
"Hostias, seguro que ha saltado una alarma en la jefatura de policía" - Un sudor frio recorrió todo el cuerpo del turulata sicópata - "Este jodido ingenio avisa de que alguien en el domicilio de la anciana. Ya estarán sonando las sirenas policiales por la calle"
Ante la mirada asombrada de la abuelilla, el diligente caballero que la había ayudado momentos antes dio media vuelta velozmente y perdió el culo buscando la salvación. Bajó de dos en dos las escaleras y... la calle estaba absolutamente tranquila, ni un sólo coche policial perturbaba aquella tranquilidad. "Uffff!", respiró hondo y se alejó a pasos largos del lugar del crimen frustrado.
Más tranquilo hubiese estado de saber que las pulseritas dichosas no servían para nada porque tenían un defecto de fabricación. Pero el concejal de seguridad ciudadana y su proveedor, un "amiguito del alma", se sentían muy satisfechos por haberles quitado el miedo del cuerpo a las pobres y desamparadas señoras otoñales.
En ese momento Doña Purita se hacía dos preguntas básicas: "Por qué ha salido corriendo como si le hubiesen pinchado en el culo?...; Por qué se ha puesto guantes si en mi casa no hace frío?