sábado, 21 de abril de 2012

Drácula, el no muerto

 








(Bela Lugosi, primer actor que interpretó a Drácula en el cine)


Ayer se cumplió el centenario de la muerte de Bram Stoker, el creador de Drácula. Me enteré por la prensa. Los periódicos también cumplen una misión como divulgadores culturales, de esta forma nos enteramos de otros centenarios importantes: Charles Dickens, "La Pepa", el Titanic... Y muchos jovencitos se ponen al corriente sobre sucesos históricos y personajes célebres sobre los que no tenían ni repajolera idea porque no acostumbran a leer libros. Los libros son una costumbre insana de puretas y gente rara.

La novela Drácula es para mi la confrmación de la grandiosidad de la literatura en relación con la pequeñez del cine. Estoy en contra del dicho "una imagen vale por mil palabras" Una buena frase o un pensamiento elevado dice más que mil imágenes. Las imágenes necesitan ser explicadas. La fuerza de la palabra siempre será superior a la fuerza de las imágenes, y un buen ejemplo es la novela Drácula.

Dice Rodrigo Fresán, autor del prólogo de la edición de 2.005: "Stocker es un mal escritor, un ejemplo clásico de creador flojo, pero de repente crea una obra genial" Pues no lo entiendo, genial también es John Kennedy Toole y su novela "La Conjura de los Necios" es lo mejorcito que leído en mi vida, pero los editores no le publicaron porque pensarían igual que este señor. (Lo consiguió su madre años después de que se suicidase)

Gonzalo Suarez, escritor y cineasta, dice que Drácula le aburre: "Empecé a leerlo y lo dejé" Pues sigo sin entenderlo. A mi me fascinó realmente. Ese "coro de narradores" (la obra está narrada por cuatro o cinco de los personajes que intervienen en la trama) consiguen crear una atmósfera de angustia, tensión y miedo que, para mi, nadie ha conseguido en otra obra literaria, y les juro que leo mucho.

En contra de la opinión de los señores citados, Oscar Wilde dijo que "Drácula es la obra de terror mejor escrita de todos los tiempos", y Arthur Conan doyle, el padre de Sherlock Holmes, tampoco escatimó elogios al referirse a ella.

El Conde Drácula (que paradógicamente sólo aparece en quince de las casi 600 páginas) está permanentemente encima del lector intrigándole, obsesionándole, acojonándole con su "ausencia" Y eso no lo consigue la mejor película, ya sea gótica en blanco y negro o muy efectista en colorines con primerísimos planos de mordiscos en la yugular.
Otra cosa, el título original de la novela era "Los no muertos", pero Don Bram lo cambió antes de publicarlo.





Un asesino como los demás (11)

Nadie podría imaginarse que aquel caballero otoñal, un vejete languido que obsequiaba con miguitas de pan a las palomas del parque, era un peligroso sicópata sediento de sangre.
Don Angel Luis, como buen sicópata de incognito, daba la imagen perfecta de un jubilata tranquilo. Aunque ahora no tan tranquilo porque una vieja de un banco próximo al suyo no paraba de hacerle gestos obscenos.
"Santo Cielo" - pensó tristemente - "que a estas edades tengan que trabajar como prostitutas callejeras!"
El bueno de Don Angel Luis no tenía ninguna gana de asesinar en estos momentos; aún no se había recuperado sicológicamente de su primer fracaso; la vieja del cuarto piso se le había ido de las manos por una extraña jugarreta del destino. A partir de ahora tendría que extremar las precauciones, no fuese que a la policía le diese por espabilar.
(Continuará)



6 comentarios:

  1. Podría matar a las palomas...envenenarlas para entrenarse

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  2. La novela de Drácula no la he leído, pero sí la de Ignatius, je je je... Muy buena, de verdad. La releo a menudo porque no tiene desperdicio y siempre encuentro detalles nuevos.
    Qué pena que su autor se suicidase.

    Yo prefiero los libros a las películas porque estas necesitan mucho trabajo para que se entiendan y al final dan tantos tijeretazos que si no has leído antes el libro, no te enteras de nada. Y encima te quedas con cara de tonto porque no, no es eso.

    Uysss... ¿Ángel Luis? ¿Es sudaca por un acaso? :D :D :D

    Oiga, que la de las zarpas y colmillos ha decidido empezar su tocho con un debate, así que dése un garbeo por allá, que no llueve ni graniza, de momento luce un sol espléndido ;D

    Dice que ojo al parche, todos atentos a la primera actividad. ¡Maricón el últimooooo! ¡Juas!

    ¡Salud a manta!

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  3. Pobres palomas!... Buenos días, Don Jesús!

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  4. Buenos días!
    Yo he leído "La Conjura de los Necios" en cinco o seis ocasiones durante unos veinte años y me sigo riendo. Es una obra maestra y un botón de muestra de la necedad de muchos editores. De haber vivido este hombre tendríamos ahora cantidad de novelas inteligentes y divertidísimas.
    Cada uno "crea" su propia novela mientras la lee, por eso es imposible estar de acuerdo con la "versión" del cineasta, aunque en ocasiones ocurre. Me pasó con "La Milla Verde", me pareció una adaptación genial, creía estar en las paginas de la novela mientras la leía. Y el otro factor es que es imposible transmitir mediante el cine las reflexiones, ironías, etc,, tanto las del narrador como las de los personajes. Incluso, si me apura, se "ve" mejor un paisaje en una novela que en una película.
    Por cierto, dónde se encuentra ahora la pestaña de "editar". Con este cambio me hago la picha un lio.
    Pues, le digo la verdad, aún no tiene personalidad ni nacionalidad ni nada de nada mi protagonista; me lo he tomado con calma, no he planificado nada, voy escribiendo los capítulos en tandas de siete o diez; primero hice hasta el siete de un tirón, luego hasta el diecisiete y el próximo día haré otros pocos más. Sin prisas, no hay ningún editor presionándome, je, je!
    "La de las zarpas"... Se refiere a su troll?... Vale, echaré un vistazo. Ahora, en este instante me voy de este ciber; dentro de una hora o así estaré en el ciber de la biblioteca de mi cole y aprovecharé para entrar en El Periódico, en la Comunidad de Blogs, etc, que el sábado no me dio tiempo.
    Saluuuuuuuuuuuudddd...!!

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    1. Muy cierto, la necedad campa a sus anchas y un editor no tiene por qué ser inteligente, sólo es un comerciante de libros en vez de frutas o pinturas.
      Pocos se salvan.

      Je je je... constantemente estoy tentada de reescribir lo que leo, ¡juas!
      No lo hago por falta de tiempo y por si la orejuda y su trepa me metían una multa. Ya sabe, eso de apropiarse de obras ajenas...

      Así es, un libro relata mucho mejor que una película y a quienes nos gusta leer nos sentimos "dentro", paseando por los paisajes narrados y aspirando los efluvios explicados. No tiene comparación.

      Sobre la pestaña de 'Editar', ya sé que al fin ha logrado volver del 'Lado Oscuro'... Pero no se confíe, que va a durar poco :(

      Ya me imagino que su obra va a su libre albedrio. Al menos es mi manera de trabajar ;D

      No, hombre, "la de las zarpas y colmillos" no es ningún troll, ¡sólo faltaba!
      ¿Quien tiene zarpas y colmillos...? ¿Quien charla con un conejo sinvergüenza...?
      El troll sólo es una cucaracha.

      ¡Salud!

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  5. Así es, "vivir" un libro no es lo mismo que "presenciar" una película. Por cierto, ya le dije que tengo que recomendarle dos que creo que le van a gustar, para que los vaya encargando ya, dado el tiempo que tardan en traérselos. No me enrollo ahora porque tengo que salir de estampida a arreglar un problema gordo que me tiene acojonado desde ayer. Otro día le digo los títulos y autores.
    Joder, pues no caigo, yo creía que se trataba de la mujer esa que la importunaba.
    Salud por kilos!

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