viernes, 9 de marzo de 2012

Me imagino la mujer perfecta

Mercedes Milá (Mercedes Milá me trae a la memoria una frase de Fernando Marías en su novela "El mundo se acaba todos los días": "En televisión, nada como darle un barniz cultural a la bazofia. De inmediato adquiere brillo de prestigio; la pornografía barata adquiere rango de evento sociológico")


La mujer perfecta existiría si reuniésemos en una sola las mejores cualidades de las mejores mujeres. Yo lo he conseguido y aquí está la prueba. Una mujer perfecta ha de contar con...

El talento literario de Ana Rosa Quintana.

La feminidad de Rita Barberá.

La exquisitez diplómatica de Esperanza Aguirre.

La pluralidad sexual de Ana Botella.

El laicismo cientificista de María Dolores de Cospedal.

La habilidad innata para el baloncesto de Soraya Sáenz de Santamaría.

La belleza salvaje de Mercedes Milá.

La altura intelectual de Belén Esteban.
  

Belén Esteban


La sobriedad de Massiel.

La discreción y el saber estar de Paris Hilton.

La ejemplaridad en su lucha contra las torturas a los toros de Doña Elena de Borbón.

La firmeza con la que se impuso a su marido para que abandonase las actividades ilícitas de Doña Cristina de Borbón.

El carisma y la gracia singular para cambiar de estilo de peinado cada temporada de Doña Sofía de Grecia.

La abnegada labor como cooperante en los países del Tercer Mundo de Doña Patricia Botín.

El espíritu de amor a la familia de Arantxa Sánchez Vicario.

El tesón en la lucha por las libertades de su pueblo de Asma El Asad.

La aplicación en los estudios para labrarse un porvenir en la vida de Estefanía de Mónaco.

La nariz ejemplar de Rosy de Palma.

La figura etérea y sus excelentes dotes como reina del ballet clásico de Montserrat Caballé.

El rigor y serenidad para envejecer dignamente de Cayetana de Alba.

Michelle Obama  El bronceado perfecto de Michelle Obama.

El desnudo armonioso y excitante de Terelu Campos.

La teta fotogénica de Cicciolina.

La envidiable silueta en bikini de Leire Pajín.

La lozanía y exhuberancia curvilinea de la Princesa Letizia.

El clasicismo y sobria elegancia en sus diseños de Agata Ruiz de la Prada.

El rechazo al lujo y al boato que la obliga a vivir en un palacete de reducidas dimensiones de Isabel II de Inglaterra.

La fidelidad a la "memoria histórica" para recordar con amor a su abuelito querido de Carmen Martínez Bordiu.



Carmen Martínez Bordiú y José Campos

7 comentarios:

  1. Para ser mujer perfecta solo hay que estar buena (Anna Simon)

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    1. Joer... Un día que no esté agobiada voy a buscar a esa y concertar una cita contigo.

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  2. ¡Juas juas!
    ¡Fantástico el mix del hombre y la mujer perfectos!

    No me atrevo a mencionar ni uno sólo de los ennumerados porque sería tonto, ya que está clarísimo ;D

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  3. Cachondísimo su apócrifo, Señor Director. A ver si nos obsequia más a menudo con hermosas estampas de la señora o señorita Simón. Además, ya sabe que eso le hace aumentar el número de lectores.
    Feliz fin de semana!

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  4. Gracias por sus "juas", amiga Aseret. La "perfecció" sólo sirve para esto, para tomársela a cachondeo. Los que se la han tomado en serio a lo largo de la historia, siempre nos han traído problemas.
    Mil gracias por tenerla otra vez por aquí.
    Salud por un tubo!!

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  5. Menuda tristeza me ha entrado al leer este post. Por lo que veo no alcanzo ni a la suela de los zapatos de estas insignes y admiradas mujeres,. En verdad no se que he hecho con mi vida. Besos¡¡¡

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  6. Pues es verdad, usted no va por la calle enseñando una teta como la Duquesa de Alba, ni tuvo un abuelito dictador como Doña Carmen. Pero yo estoy seguro de que goza de otros encantos. Besazos!

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